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Reflexiones y acciones de mi Patria                  MOMENTOS HISTÓRICOS


                   Las objeciones al Tratado, de los panameños leales, tal como lo ha
                 previsto su Secretario de Estado, Sr. Hay, se han agudizado a través
                 de la última mitad del siglo.  Ha habido un retroceso del colonialismo
                 alrededor del mundo, dando lugar a actitudes más cónsonas hacia las
                 relaciones internacionales, para lo cual Estados Unidos ha sido un
                 vocero influyente.  Durante este período, el resentimiento en contra de
                 los términos del Tratado de 1903, se ha recrudecido, ya que lesionan
                 la dignidad de todo panameño leal.  Los comunistas y castristas bus-
                 can explotar este resentimiento, pero ellos no lo crearon.  En efecto, es
                 precisamente porque somos panameños leales que insistimos en que
                 su Gobierno evite una postura de acorralamiento, lo que fortalecería
                 el clamor y la posición de los enemigos de la democracia en Panamá.

                   Es dudoso que la Política del Buen Vecino de Franklin D. Roose-
                 velt haya podido sobrevivir a condiciones como la actual, que rede-
                 cordaremos con antelación, solamente para “discutir” nuestras di-
                 ferencias, pero, no necesariamente para realizar cambios.  Además,
                 pensamos que el fallecido John F. Kennedy habló para la gente de los
                 Estados Unidos y no para él, cuando dijo en su discurso inaugural,
                 “Nunca negociemos por temor.  Pero nunca temamos el negociar”.


                   Creemos firmemente que los Estados Unidos tienen tanto como
                 Panamá, para ganar, en la negociación de un nuevo Tratado, con-
                 sistente con los elevados principios adoptados por una casta de lí-
                 deres de los Estados Unidos en la posguerra.  Al relegar el Tratado
                 anacrónico de 1903 a los anales de la era pasada que ejemplifica,
                 sería un acto de estadista, que le daría crédito a una gran y poderosa
                 nación.  Elevaría las relaciones de los Estados Unidos-Panamá a un
                 nivel de sociedad, y esta es la única base para una amistad interna-
                 cional, duradera.

                   *El  reporte  del  Congreso  No.2218  sobre  la  Relaciones  de  los
                 E.E.U.U. con Panamá por la Subcomisión de Relaciones Internacio-
                 nales, Congreso, Imprenta del Gobierno de los Estados Unidos.




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