Page 64 - Reflexiones y Acciones de mi Patria-eBook

EDUCACIÓN Y FORMACIÓN Reflexiones y acciones de mi Patria

siguiente, recomendamos que la educación fuera elevada a política
de Estado, de manera que trascendiese a los gobiernos de turno. Así
se inició una campaña de concienciación, que nunca tuvo el respaldo
de los gobiernos que se sucedieron después de 1989.

Las políticas educativas del país, lamentablemente, no han tenido
ni consistencia ni claridad y menos aún, la implementación requerida.
El presupuesto educacional de Panamá es millonario, pero los resul-
tados son deprimentes, el rendimiento y los logros son trágicos, pues
no se corresponden con la inversión realizada. Es un despilfarro de
recursos y todo porque, en más de 20 años, la educación se ha poli-
tizado con el clientelismo electoral, al extremo de escuchar a diario
sobre los grandes escándalos y corruptelas, desde el robo de fondos,
licitaciones amañadas, planillas abultadas y, en general, acciones rea-
lizadas en nombre de la educación, que no obstante, son contradicto-
rias e inconsistentes con las realidades y necesidades del país.

A raíz de estas prácticas negativas, es imposible que la educación
panameña avance en la dirección correcta. Nos corresponde exigir,
como contribuyentes y ciudadanos responsables, un cambio cuali-
tativo, el cual debe iniciarse con una reingeniería administrativa y
financiera del Ministerio de Educación. No es tolerable que esa en-
tidad tenga en la actualidad una planilla administrativa de más de
10,000 personas, cuando en Colombia, país con más de 40 millones
de habitantes, la misma planilla es de 3,000 funcionarios, y ya ha
sido reducida a 800.

Es urgente poner la casa en orden, con criterios programáticos
y funcionales, sobre todo en lo administrativo y financiero. Así se
facilitará la corrección de los muchos otros entuertos, tales como el
nombramiento de docentes no idóneos, la reforma de los planes de
estudios, el deterioro creciente en la infraestructura de los centros
educativos, la alimentación de los alumnos, la capacitación y actua-
lización permanente de los docentes, entre otros. Estoy convencido

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